martes, 14 de abril de 2020

Semana 5

35 días de cuarentena. Parece que hace un siglo que empezó todo, como si el tiempo se hubiese dilatado y pasara muy lentamente. Sigo llevando bien el confinamiento, aunque hay días que me gustaría salir a pasear, especialmente ahora que hace una temperatura buena y tenemos cielos grises. La ausencia de gentío hace que incluso sea más atractivo.

Si no fuera por el trabajo, la situación sería incluso más llevadera: hay montones de actividades con las que ocupar el tiempo y tengo una gran libertad para configurar el día como mejor me parezca. En el trabajo las cosas están muy revueltas. Es una sensación de que hay algo que no está bien, aunque no sepa exactamente qué. Y hoy se confirma un ERTE, que no sabemos en qué manera nos va a afectar. En realidad tengo poca capacidad de actuación y creo que lo mejor en estos momentos es mantener un perfil bajo y dejar que escampe. Yo hago mi parte y dejo que el Universo se encargue del resto. Debería ser fácil, pero la pequeña controladora que vive en mí se revuelve ante esta idea. Creo que esto me va a enseñar mucho sobre desapego y aceptación.

Nunca he pensado en un plan B y cuando intento hacerlo es como si un muro se levantara en mi cabeza impidiéndome ir más allá. ¿A qué podría dedicarme yo? ¿Qué es lo que tengo que ofrecer? Me da miedo pensar que la respuesta sea "nada". Veo a mis pares hacer movimientos de colocación en la empresa y pienso: "joder, estos sí que saben".Hay una oportunidad de moverse hacia arriba y la están aprovechando. Yo no sé si quiero eso. Quizás sea más seguro vivir en las alturas (hasta cierto punto), pero hasta la fecha la tendencia era asumir más reponsabilidad a cambio de subida cero y, sinceramente, no estoy por la labor. Es más, es que no quiero asumir más responsabilidad, sobre todo porque mi vida se compone de más cosas que la empresa y no estoy dispuesta a sacrificar esas partes por una sola, que tampoco es la más agradecida. Tampoco estoy en condiciones de ascender. Desde que asumí mi nuevo rol me siento tremendamente incómoda: a veces me siento que sobro, a veces me siento incompetente. Y todo parece tambalearse.

Pero no son tiempos para las florituras. Así que es tiempo de refugiarse y capear el temporal de la mejor manera que se pueda, lo que nos dejen. "Cada uno hace lo que puede con lo que tiene mientras puede". Es un pensamiento un poco derrotista y triste. De esos que seguramente crean realidades indeseadas, según el libro "Transurfing". Acabo de empezarlo a leer. Es un tocho importante. Yo diría que lo ha escrito un eneatipo 5. En él se explica el modelo de las infinitas alternativas y cómo intentar escoger la que uno quiere (ojo que el libro indica que los sueños no se cumplen). Quizás sea todo mentira, pero me encanta la forma en que lo expresa con términos físicos y metáforas cotidianas. Hay frases que me subliman, como ideas increíbles que admirar, independientemente de si son absurdas o no. En cierta forma rozan la poesía prosaica, si eso existe. Si sigue así, conseguiré terminarlo, cosa que no conseguí con "Curso de Milagros".

Sé que uno de mis retos, incluso previo al coronavirus, era divertirme más. Tiene mucho que ver con deshacerme de todas las capas que me he creado alrededor, cual coraza, de toda esa rigidez que me envuelve y me impide avanzar, que me hace ser lenta, que me hace dar respuestas densas, que me hace ver todo difícil y complicado. No tengo un método, pero tengo una intuición: me encanta bailar. El sábado me apunté a una clase de bachata online y decidí, no sé por qué, prepararme un cubata, arreglarme y pintarme como si estuviese en una discoteca. Incluso rescaté los zapatos de salsa para la ocasión. Retiré la mesa del salón y me creé una pista de baile. Me lo pasé como una enana. Se me da bien seguir los pasos, me gusta la música en general y tengo sentido del ritmo y la coordinación. Cuando bailo, me siento libre. Es un poco lo mismo que cantar. Tiene que ver mucho con expresar lo que uno es. Hacía mucho que no me sentía tan contenta y entusiasmada. Ojalá repitan pronto las clases para poder unirme a ellas y tener unos momentos de evasión. Evasión en mi ser.


No hay comentarios:

Publicar un comentario